De rodillas

La postura del amante.
No humilla;
Rejuvenece.
Sitúa el rostro a la altura,
justo a la altura de un vientre.
Puede renacer de él.
Renace de su postura.
No humilla.
Rejuvenece.

No hay un mayor quita-años
quita-pesos-de-encima,
que este encontrar el verdadero Amor
en sitios insospechados
y cuando menos lo esperas.
Hunde en tierra tus rodillas
de adoración por el Cosmos.
Por ello fue creado:
Para servir de vasija a tales sentimientos.
Un brote de esos es lo que se espera
de cada uno de nosotros.

Y no hay mayor odio que te abrume,
desesperanza que te arrolle,
que este ser estafado por los dioses
en algo de esa altura.
¡Cómo mi Amor no existe?
¡Cómo matas esto?
Y al igual que el Drácula de Coppola
("Drácula -El amor nunca muere-")
clavar la espada en piedra insensible
para volverla sangre
con que inundar la Tierra.
¡Que no solamente de mi sentimiento masacrado!
¡Bebed también la vuestra!

De mi "Esta luz sepultada", sigo pidiendo a los puestos al corriente en el mundo de las letras que cotejen muchos, cuando no todos, los poemas pertenecientes al libro dicho, como éste, y ver si hay "duplicaciones", versiones, plagios serían, de los mismos en obras de otros.
La mayor parte de los poemas a él pertenecientes irán pasados a mi diario "Víctimas en democracia", pero también en mis siete restantes aquí en blogger, además de estos dos.

Otra muestra del mismo poemario:

Brazos estas músicas

para mecerte.
Muy estrechadita entre la onda acústica
danzándote llevando
llevándote danzando.
Así, en música, para tomar tu talle
de la forma más prieta y apropiada.
Quiero convertirme en Obra de hombre
que no renuncia a nada.
No quiero ser de carne
martirizada siempre
con faltas escandalosas
ausencias irrompibles.

Brazos de música
para estrecharte hasta el ensueño;
y que no huyas,
no me abandones nunca,
de estar tan encantada.